Arreglado!

27 septiembre 2020

Hola, la pesadilla terminó, logramos colocar las columnas derechas donde debían estar. El blog recobro su personalidad, ahora solo toca volver a embambarlo.

DisculpenmeN

02 agosto 2020

No se que paso con Blogger pero no he podido solucionar lo del contenedor que debería flotar a la derecha y se queda ahí, en el fondo, dañando así toda la estética que se traia. Ojala lo pueda corregir. Se aceptan sugerencias

Obregón, 100 años

04 junio 2020

Hace mucho tiempo, cuando en esta ciudad existían galerías, si, GALERÍAS, así en mayúsculas, en la de Avianca que quedaba ahí en la esquina de la 72 con carrera 58 en un ciclo de conferencias programadas junto a exposiciones fue invitado el maestro Obregón. Imagínate tú, uno en Bellas Artes, todo afiebrado y llega el más del color a tirarnos línea.

Asistimos temprano y esperamos la llegada del maestro. De pronto, murmullos, correndillas, todos pilas y ahí estaba él subiendo las escaleras que llevaban a la galería. No recuerdo como estaba vestido pero si cuando nos acercamos a tener un recuerdo suyo, un autógrafo sobre lo que fuera.

Corrían los 80 y además del carboncillo me había afiebrado en el uso de tintas y con la ayuda de un ¿estilógrafo? ¿marcador fino?, unos no sé cómo llamarlos pero que me parecían del carajo para dibujar. Eran unos plumigrafos plateados, pequeños, de punta fina y húmeda. Con ellos tiré buena línea en una época donde el grafismo intentaba sobresalir y quedaban rezagos de esos collages de la época de las flores. Hoy, hay artistas que hacen lo mismo y gana cualquier cantidad de dinero. Pero eso es otro cuento.

¡Maestro! ¡Maestro! Grito. En medio de la aglomeración voltea y me pide los utensilios donde y con que firmar. Le paso de rapidez un sobre pequeño y el plumigrafo. Lo mira, lo repara y dice algo así como que era una herramienta para mariquitas. Para corroborarlo firma con toda sum fuerza sobre el sobre su afamada firma y la punta del plumigrafo se dobla. Me los entrega con una mirada condescendiente, como diciendo, viste. Guarde por un tiempo el Pentel y por ahí en todos esos papeles que forman la concha del caracol debe estar un sobre con la firma del Obregón

La vida cotidiana

17 noviembre 2019

Hoy comienzo el día de ayer
con palabras y con deseos:
ya los zapatos tienen polvo
de mañana: sin excepción
los actos se me vuelven huellas.

Vemos al ciervo y hasta a veces
llega a beber en nuestras manos,
pero la sed se le hace vieja
como un abuelo entre los labios.

Somos del hoy, mas lo que hacemos
pertenece al pasado, somos
la fuente que se queda: el agua,
quiero decir, la vida, pasa.

A mi oído llegan las voces
que mañana diré, mañana:
la suerte mía de callar
con la palabra de otro día.

Si se lanzara el sueño al aire
como unos brazos, si una red
—del ayer a lo que seremos—
nos circundara! Pero todo,
todo lo que hago es ya pasado.

Ahora yo que soy recuerdo
me miro adentro y huelo a solo,
y muy vagamente distingo
al abuelo que está en mi rostro.


A propósito de las citas… literarias

13 noviembre 2019

Todo es citable, pero me quedo con esto:

    Las citas resultan útiles en los períodos de ignorancia o de creencias oscurantistas. Las alusiones, sin comillas, a otros textos de muy reconocida fama, como se hace en la poesía clásica china, en Shakespeare o en Lautréamont, deben quedar reservadas para tiempos más ricos en cabezas capaces de reconocer la frase anterior y la distancia que ha introducido su nueva aplicación.

Hoy en día, cuando la ironía misma no se comprende siempre, se corre el riesgo de que a uno le atribuyan con toda confianza la cita, que además podría incluso ser reproducida apresuradamente de forma errónea.



Como pasa el tiempo, un blog que nació como un espacio para hablar de la ciudad que habito, Barranquilla, termino relegando a Caribanía magazine que era el sitio de batallas, a un segundo lugar. A la larga termino absorbiéndolo.

Hoy un poco dejado por la presencia e inmediatez de las redes sociales, por ejemplo Twitter, también ha sufrido la dejadez. Esperamos el 2020 empezar con toda y recobrar la presencia que siempre hemos tenido.

Gracias  a los que nos leen, los que nos visitan y sobre todo a los que opinan

AMOR

08 noviembre 2017

¿De dónde viene la palabra amor, dónde vivía antes de mudarse al latín, amor, amoris, y de allí al provenzal (amor), al francés (amour), al italiano (amore)? ¿Cuál es su oscuro origen? Algún sabio sugiere que amar viene del verbo sánscrito kam, desear; y aun otro lo refiere al verbo am, de aquella misma lengua, que significa estar enfermo. Estar enfermo de deseo. ¿Será eso amar?

Yo escucho, sin embargo, un mantra remoto. Un jadeo ancestral y sexual de cuerpo y boca abiertos en AH, AH, A, A, A, que se remansa, aún ansioso, en la nasalidad meditativa de la M, MM, MMM, hasta acabar de pronto en esa OH, OH, O, cerrada, perfecta y circular, que es como un orgasmo que nos precipita al abismo interior... AMOR.

Síntesis de lo abierto y cerrado, del principio y el fin, alfa y omega, compás bisílabo de yin y yang, ritmo del mundo, vislumbre del Tao. Algo divino hay en esta palabra, como en todas.




Tomado de 10 palabras que conmovieron al mundo