Desde hace más de quince años el gobierno prohibió el uso de tinta indeleble como prueba fehaciente de haber sufragado.
– Era como mancharte el índice tras haberlo introducido en un cuerpo corrupto –.
Hoy, a pesar del tiempo transcurrido, aún se siente al votar un asco de manos por lavar.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 Comentarios:
Publicar un comentario