Desde allá, desde donde en vez de un Sol aparece un dólar un grupo de apostatas atrevidamente entraron a nuestro imaginario de sones y tomaron a la fuerza uno de nuestros mas preciados iconos y lo convirtieron en fast music, en ensaladita Light.
Y lo peor es que sus aúlicos, los de aquí, los de allá y los de acullá haciéndoles eco, machacan las nuevas versiones de toda su música – espulgada de tu aguaje de esquina, de callejones sin salida, de juanitos alimañas, de todo lo que trae el monte adentro - como si hubieran descubierto como termina el cuento del gallo capón.
Venerado Héctor, perdónalos, ellos imbuidos en una atrevida globalización mal entendida creen que hacen historia cuando la historia la hiciste tú. Si no, que le pregunten a Lola.
Por eso desde aquí manifestamos que no oiremos ninguna emisora que coloque discos de dicha película, no rumbearemos en ningún sitio que se atreva a colocar cualquier corte, ni compraremos todo lo que vuela a EL CANTANTE.
Como lo vaticinaste, llegaron los anormales y se extendieron por todo el Caribe.
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