¿Existe en los noticieros autorregulación o autocensura que permita mirar todas las noticias con el mismo lente? ¿Generan mas audiencia los close-up del accidentado, la sangre que mana, las lagrimas ahí casi en tu cara o la confesión pixelada de cualquiera victima que las notas que nos afectan a todos y que no tienen el mismo despliegue?
Si la política del noticiero es informar debe tener en cuenta el horario en que se emiten las noticias para no generar en la audiencia rechazo. ¿Como se le ocurre al noticiero del mediodía, que se emite por Telecaribe, dar paso a un espacio de salud donde te explican detalladamente en que consisten las hemorroides y como se deben tratar o en el momento en que masticas te salen con los síntomas del estreñimiento – explicados repito detalladamente sus síntomas y como se debe prevenir –? No hay derecho.
Otra cosa es la emisión de notas soslayadas o a mediatintas con que algunos de estos entes audiovisuales quieren convencer al televidente que su posición es la verdadera y que hay que tener en cuenta. Hay esta el caso de la prohibición que ha hecho el gobierno venezolano de algunos ritmos musicales en las escuelas; esto último se omite para darle más dramatismo a la nota y de paso generar un rechazo a las políticas del presidente Chávez. O el rechazo del afamado escritor – Fernando Vallejo – a la ciudadanía colombiana.
Dejemos tanta sangre, tantas balas, tanto asesinato, tanta noticia amañada y centrémonos en que se esta haciendo para prevenir todo este caos. La autoridad entrevistada por periodistas de escritorio – esos que no les toca salir todos los días a guerrear la ciudad como lo hace el ciudadano común – no siente la problemática, ese miedo que nos invade al caer las sombras, al salir de un banco, al contestar el móvil, al temor de denunciar ante la seguridad que los implicados alertados por quien sabe quien vendrán y nos cobraran ese atrevimiento a señalarlos.
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2 Comentarios:
Las noticias cada vez, con más descaro, se muestran parcializadas. Un ejemplo de ello fue el paro de maestros: la noticia en Caracol y RCN no fue el paro, sino los trancones que se armaron en Bogotá producto del paro. Como si protestar no fuese un derecho constitucional.
Ya uno no sabe qué hacer: unos apoyan ésto, otros apoyan lo otro. Tocará ver media hora de CNN, y media más de Telesur para sopesar. Qué desgracia.
No es por defender al payaso veneco, pero la prohibición del vallenato y el reggaetón en las escuelas fue dictada por una junta de educación de un solo estado, cuyo gobernador es de la oposición.
De resto, estoy de acuerdo con esta entrada. Aunque eso es culpa de todos, que almorzamos viendo muertos desde hace muchos años. Un saludo.
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