Uno de los problemas más graves que afronta nuestro país es la falta de Justicia, la aplicabilidad de la misma en cualquier nivel de delito o estrato.
Traigo esto a colación pues muchos ladrones de cuello blanco, que se han robado cualquier cantidad de dinero, que la pruebas están ahí, que todo el mundo sabe, son investigados, salen muy campantes con la frente en alto, riéndose de la inoperancia de nuestras leyes y dándose la buena vida en otros países o recompensados en excelentes puestos públicos.
¿Que se deja entonces para el malandro de esquina? ¿Cómo crees que asimilará esto?
- aja, si ese man la hace y no le pasa nada, ¿porque a mi si? Y envalentonado empuña el acero y sale a cazar -.
¿Que tiene que ver esto con el proceso electoral que acaba de culminar?
Que la falta de esa justicia, de la aplicabilidad de esas leyes, que deberían ser para todos, se la pasan por la faja.
¿Con que cara voy a denuncia a la persona que vende su voto? ¿a la que lo compra? ¿Al que entro el móvil al cubículo para refrendar su votación y se la paguen? ¿Al jurado que tachó a los de su partido en los tarjetones que sobraron o no fueron utilizados y los metió en la urna?
Si nuestro presidente participo abiertamente en política, apoyo directamente y de manera descarada a los candidatos de su preferencia y las personas encargadas de llamarle la atención, de investigarlo se quedaron callados…
LEER MAS: Uribe perdió en BogotáPero, más allá de que no nos guste que nadie se nos meta al rancho, estas elecciones serán recordadas por haber sido las primeras en que un Presidente interviene abierta y directamente en política a favor de un candidato y que lo hace de manera temeraria, recurriendo a tácticas difamadoras para socavar a sus oponentes. El Presidente le hizo trampa a la ley y se pasó por la faja el régimen disciplinario que deben cumplir los funcionarios públicos, demostrando su desprecio por las reglas del juego y por los votantes. Si tuviéramos un Procurador en todo su vigor, hace rato el Presidente habría sido investigado por participación en política
Al margen:
No estoy de acuerdo con la señalización demasiado directa que pareciera acusar al nuevo alcalde de la capital de ser seguidor de las políticas de su abuelo y que se hace en la misma columna
Un triunfo tan aplastante como lo tuvo el Polo ayer en Bogotá no puede terminar reencauchando la memoria de un dictador de ingrata recordación entre muchos colombianos.
Pues al igual que el muchos de nuestros expresidentes han estado involucrados en masacres, exterminios – recordemos el de la UP, las caballerizas, los asesinatos selectivos a los del Palacio de Justicia -, nexos con paras, con narcos, etc y no son signados.
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